Después del trabajo Mine le pregunta a Ikki si tiene diez minutos. Él se excusa diciendo que está muy ocupado y ha prometido acompañar a Heroine a casa, pero al final accede y le pide a nuestra protagonista que lo espere. Al final le toma media hora hasta que corre a su encuentro y se disculpa por hacerla esperar. Se da cuenta de que Heroine tiene las manos heladas y le propone cogérselas, porque su cuerpo está caliente por haber venido corriendo, pero luego dice que seguramente le diga que no.
Se sorprende cuando Heroine acepta, y entonces se toman de las manos mientras caminan hacia casa. Ella le pregunta de qué quería hablar Mine, e Ikki responde que era lo usual, como por qué no la ha dejado ya y si no quiere salir con ella en su lugar, porque sería más divertido. Por supuesto que él la ha rechazado, y empieza a murmurar para sí mismo sobre que muchas mujeres le dicen cosas así, no sólo Mine.
Ikki admite que a veces simplemente odia a las chicas. Heroine le pregunta si la odia a ella, pero él responde que no, porque no lo ama. Cuando está en casa recibe un mensaje de Ikki, en el que le pregunta sobre una situación hipotética que trata sobre un hombre que le gusta a ella y una chica que está intentando salir con él en su lugar.
El joven le pregunta si confesaría sus sentimientos en una situación así, y ella responde que no. Ikki replica rápidamente que no pensó que lo haría, y tampoco confesaría en una situación así. Le da las gracias y dice que se siente aliviado por alguna razón. Orion se pregunta si el mensaje de Ikki tiene algo que ver con la situación con Mine.
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